Simulando un humano

martes, octubre 25, 2005

Mi memoria es de 8 bits

Uno de los motivos por los que nunca sé que responder cuando alguien me pregunta por la calle: “¿Qué tal estás?” es porque paso muchas horas con mi ordenador.
Esta historia transcurre una de esas tardes tontas que se gastan tirando líneas de código para un programa que en realidad no necesitas y que con toda seguridad alguien ya ha hecho con mas gracia que tu.
En medio de mi pantalla apareció un mensaje que decía “Dime una sola cosa que hagas mejor que yo”.
Varias sensaciones cruzaron mi mente:
.-Sorpresa (menor de lo que podría llevarse un neófito, al fin y al cabo siempre he pensado que alguna forma de vida inteligente tiene que haber en un microprocesador) al comprobar que mi ordenador era capaz de plantearme una pregunta con un claro cariz humano (por lo absurdo).
.-Vergüenza: Si hasta mi ordenador piensa que es mejor que yo debo ser la comidilla en la oficina.

Después de pensármelo respondí: “Croquetas”. El iconito del reloj de arena se puso a dar vueltas como un loco durante unos minutos. Se paró y apareció otro mensaje: “Puede ser, pero mi superior intelecto me permite realizar, en micro segundos, cálculos que a tu débil mente le costaría días, dime una operación que quieres que resuelva”.
Ahora si que estaba seguro de que algo raro le pasaba a mi ordenador, normalmente era mucho menos pedante. Sólo por darle el gusto escribí: “2/0”. De nuevo el reloj de arena unos minutos luego se apagó y ya no ha vuelto a encenderse.

RyC

4 Comments:

  • Buenooooo. Ya está comenzando la rebelión de las máquinas.

    Lo orgulloso que me siento de mi pequeña biblioteca personal. Hasta ahora ningún libro ha pretendido ser superior a mí, no me insultan ni me rebaten cuando hay otras personas delante.

    Ya con este comentario quiero reivindicar la versatilidad de los humanos, un ordenador puede hacer cálculos complejos en mucho menos tiempo ¿y qué?, si con ese resultado no sabe qué hacer o no sabe interpretar los datos. Pondré dos ejemplos:

    - Hace un tiempo, en la biblioteca de mi municipio me sorprendió un libro, en ese momento no lo podía pedir prestado por tener otros en casa, a los pocos días, mandé a mi hermano a por él, no recordaba el título, le di uno y unas indicaciones para encontrarlo, al cabo de unas horas me trajo el libro pese a que el título que le había dado era completamente equivocado (por una vez mi hermano ha servido para algo).

    -Segundo caso, recientemente en la oficina adquirimos un nuevo ploter, costo configurarlo toda una tarde y todavía no funciona del todo correctamente, y estoy hasta las narices y más de la frasecita típica de que la máquina no se equivoca y si no funciona es porque el factor humano es el que ha fallado en algún punto del proceso. Ahí va, la órden es bien sencilla, lo que aparece en pantalla que se imprima allí (léase ploter), algo tan sencillo no podía saldarse salvo con innumerables mensajes de error. A cualquier persona no le sucede lo mismo, con una ligera idea general sabemos lo que se nos pide y no damos una y otra vez desesperantes mensajes de error.

    Por esto afirmo que esa máquina que ahora encima se vuelve presumida y soberbia sí que es tonta y que es fallo suyo y no error humano cuando queremos que lo que aparece en pantalla se imprima en algún sitio o lo que queremos que sea en negrita y subrayado sea así y no aparezca un mensaje de error en la fuente.

    Con deseos de tirar el ordenador por la ventana, me despido hasta otra ocasión de visitar tan agudos comentarios del autor y de los visitantes

    By Anonymous Anónimo, at 10:37 a. m.  

  • Ya se lo decía a RyC en el anterior post... no nos queda mucho de supremacía respecto a los ordenas, mejor aprovecharla. El punto clave será cuando consigan traducir un orgasmos a bits, entonces...estaremos perdidos.

    El cuento es genial, y gracias por la foto.

    By Anonymous Anónimo, at 1:07 p. m.  

  • Cuantos bits harán falta para codificar un orgasmo?. Interesante cuestión. Se estudiará.

    By Blogger Visinic, at 1:12 p. m.  

  • Bien hecho. Y una patada en el teclado le tenías que haber metido a ese artefacto de mierda. No te digo, la maquinucia...

    Yo me siento un poco raro cuando entro en garitos tecnológicos (no digo el botiquín de la Enterprise, basta con una tienda Movistar) porque ni sé ni me importa para qué sirve nada de allí (es importante pensar esto con cara de póker porque al final te encuentras mirando al dependiente).

    Por lo demás ¿acaso los ordenadores dan leche o jamones?

    By Anonymous Anónimo, at 10:36 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home